Reporte

Dos contactos distintos hicieron perder las esperanzas de Juncos Hollinger Racing de llevarse un par de resultados sólidos del Gran Premio Acura de Long Beach esta tarde.

Los pilotos Callum Ilott y Agustín Canapino sabían que tenían un buen ritmo de carrera en sus autos y estaban dispuestos a dejar atrás una frustrante sesión de clasificación cuando la tercera ronda de la NTT INDYCAR SERIES se puso en marcha en California.

Pero Callum tuvo problemas en la vuelta 7 cuando su Dallara-Chevrolet #77 se salió en la curva 1 y golpeó el muro. El impacto dañó la rueda delantera derecha y Callum se vio obligado a hacer una parada en boxes no programada. Se reincorporó a la carrera en la posición 26, con una vuelta menos.

El debutante Agustín empezó con confianza su primera carrera en el complicado circuito callejero de Long Beach y rodaba en la posición 23 cuando se contabilizaron las vueltas. Sin embargo, el argentino sufrió un contacto al tocarse con un rival tras el relanzamiento en la vuelta 26.

Agustín no pudo evitar que su auto #78 entrara en contacto con el muro de la pista y los daños en la rueda delantera izquierda tuvieron que ser reparados en boxes. Regresó a la pista para completar la carrera, pero finalizó en posición 25 a 33 vueltas del líder.

Callum, por su parte, cruzó la línea de meta en la posición 19.

Callum Ilott dijo:

“No ha sido una buena carrera ni un buen fin de semana en general. Íbamos con el pie izquierdo desde el accidente de los entrenamientos libres 2 y no ha sido fácil. A veces es así y fue una sumatoria de cosas que se fueron dando. Es un poco decepcionante y sabíamos que iba a ser difícil. Va a ser muy bueno pasar a Barber y volver donde esperamos estar más fuertes.”

Agustín Canapino dijo:

“Desgraciadamente, tuvimos mala suerte en el momento en que terminó mi carrera. Perdí algo de tiempo cuando Callum salió de boxes con neumáticos fríos y en ese momento [Hélio] Castroneves intentó adelantarme y yo no sabía que iba una vuelta por detrás. Mi auto tocó el muro y se rompió. Ha sido una pena porque hoy teníamos un buen auto con los neumáticos negros, pero esto son las carreras y este tipo de cosas pueden pasar. Ahora intentaremos aprender y volver más fuertes para la próxima carrera”.

Ricardo Juncos dijo:

“El fin de semana no ha ido como esperábamos. Teníamos mucho ritmo en los autos y eso supuso una gran mejora respecto al año pasado, pero el fin de semana empezó mal tras la clasificación y la carrera también fue difícil con contactos para ambos pilotos. Es un fin de semana difícil de digerir porque el ritmo estaba ahí, pero no pudimos demostrarlo. Quiero dar las gracias a todos los miembros del equipo porque, incluso en los momentos difíciles, la química siempre está. También me gusta ver cómo siguen trabajando muy bien en conjunto Callum y Agustín. Como equipo, estamos aprendiendo todo el tiempo y progresando. Dejaremos atrás rápidamente este fin de semana y esperamos con muchas ansias la prueba de en Indianápolis para las 500 Millas y la próxima carrera dentro de un par de semanas en Alabama.”